¿Alguna vez lo has oído? Alguien conformista, o alguien luchador, pero resignado. Probablemente alguien que te quiere y se preocupa porque te expongas, o porque te arriesgues. ¿te lo han dicho, verdad? "No intentes cambiar el mundo, porque no se puede", sentencian muchos.
La verdad es que, aunque no lo creas, lo estás haciendo! Estás cambiando al mundo! Vaya...!
Estás colaborando junto a miles de millones de otros seres humanos, en este preciso instante, para cambiar el mundo: Estás transformando el planeta, un poco, muy poco, cada día. Pero como no estás solo, sino que ese pequeño aporte tuyo se combina con el de muchos otros como tu, los efectos ya se están viendo.
Estás colaborando junto a miles de millones de otros seres humanos, en este preciso instante, para cambiar el mundo: Estás transformando el planeta, un poco, muy poco, cada día. Pero como no estás solo, sino que ese pequeño aporte tuyo se combina con el de muchos otros como tu, los efectos ya se están viendo.
Por ejemplo, cada año, estás generando 1 tonelada de basura - de 1 a 3 kilos al día-. ¿No es mucho? Multiplícalo por treinta millones en tu país, o por siete mil millones en todo el planeta... Trata de verlo en perspectiva: El transporte que usas para ir de tu casa al trabajo, y de regreso, tu casa, tus aparatos y equipos, prácticamente todo lo que haces, consume energía. Energía que alguien produce, y que alguien vende. Muy probablemente tu no sabes cómo se produce esa energía, pero está allí, la usas, te beneficias de ella, y no es gratis: o pagas directamente por ella, o lo haces de forma indirecta, pues la paga tu Estado.
La verdad es que las empresas nacionales y transnacionales que producen energía y basura, ganan miles de millones de dólares, que van a los bolsillos de alguien. Esas empresas contratan con las autoridades de los países, que -con honrosas excepciones- nada tienen que ver con el ambiente, ni con el calentamiento global, ni con el planeta. Esos representantes muchas veces -la mayoría- aprueban cosas que afectan al ambiente, a cambio de una comisión, que tú generas y también pagas.
Las fábricas de detergentes, derivados químicos, plásticos y sobre todo la industria petrolera, están afectando de forma terrible e irreversible al planeta. Y tu -a pesar que te han dicho que no puedes cambiar nada- cuando consumes, aceptas y pagas sin preguntar, estás ayudando a cambiar todo!
Estamos acabando con las abejas, lo sabías? Y sin abejas no hay vida (como la conocemos, claro). La deforestación de enormes extensiones de selva, la destrucción de la cabecera de los ríos, la extinción (sí, para siempre) de muchas especies de animales y plantas, el calentamiento global (otra vez), la alteración de corrientes oceánicas y la modificación del clima del planeta... Y todo eso a cambio de mucho dinero para un grupo reducido de gente que no estará viva cuando el planeta se nos acabe.
Así que... Estás cambiando el planeta... Y qué puedes hacer? Dejar de trabajar? De comer? De ver tele? Eso ayudaría, claro, pero no se trata de eso. Se trata de que entiendas, primero, que es mentira lo de tu incapacidad de cambiar al mundo.
Y cuando lo entiendas, entonces puedes cambiar todo! Si puedes hacer montañas, ayudando a producir sietemil millones de toneladas de basura al año, entonces puedes ponerte de acuerdo con toda esa gente como tú. Organízate, pero de verdad. Ponte de acuerdo con tu comunidad. Recicla. Anima a tus vecinos, y no importa que te llamen loco. Investiga y encuentra tu mejor alternativa. Invita a otras comunidades a que hagan lo mismo y verás que el cambio llega.
TU SÍ PUEDES cambiar al planeta, y la prueba es que, justo en este momento, lo estás haciendo!
Por un mundo gobernado por seres humanos.
Ludwig Moreno
No comments:
Post a Comment